¿Tienes el síndrome del gemelo evanescente?

El síndrome del gemelo evanescente

Ayer hablaba de los amigos que tienen tatuajes gemelos, hoy hablaré de gemelos evanescentes, gemelos simbólicos, de gemelos perdidos. De personas que se pasan la vida con la sensación de que les falta algo. No me refiero a yacentes, sino de personas que buscan a alguien que sienten que han perdido y no saben quién es, ni por qué lo hacen.

El mundo está lleno de gemelos

Los gemelos son clones, hermanos mellizos concebidos de un mismo óv. y esp. (te recomiendo invertir media hora en el desaparecido programa Redes para la ciencia, Punset y su equipo nos hablaron de Genes, clones y gemelos).

La mayoría de mamíferos traen al mundo a más de un hijo en cada parto. En el caso de los humanos también debería ser así pero nuestra biología lo impide, muchos embriones gemelos no prosperan sobre todo durante el primer trimestre del embarazo, no se sabe por qué ocurre pero es natural, muchos se quedan por el camino, desaparecen de su crisol por arte de magia.

La madre no es consciente porque solo aparece un pequeño sangrado. Nos lo cuentan en el documental de National Geographic en el crisol materno: gemelos, trillizos y cuatrillizos.

A veces las madres sí son informadas de ello en una ecografía rutinaria, otras nunca se les ocurriría sospechar algo así… Concretamente las que se someten a fecundaciones in vitro saben siempre cuantos de los embriones que se introducen, se llegan implantar (máximo tres) y cuáles no consiguen vivir.

En algunos casos puede que queden rastros del gemelo perdido en la placenta o que el gemelo que sobrevive absorba a su hermano en alguna parte de su cuerpo y se sorprenda con este hallazgo en un examen médico.

A veces la ida del gemelo se produce cuando el embarazo está más adelantado y es entonces cuando la madre, padre y el entorno son más consciente de la situación: un hijo/hermano marcha y el otro se queda y además hay que tirar para adelante con sensaciones ambivalentes de tristeza y alegría por ambas partes.

¡He encontrado a mi alma gemela!

Los gemelos supervivientes no son conscientes de haber empezado la vida bien acompañados por un hermano o si tienen esta información no le conceden importancia, es un dato más de su biografía, pero acaban buscando de alguna forma a su hermano en alguien que sea como ellos.

Nos han hablado tanto del Santo Grial, del efecto de encontrar a nuestra media naranja, que ya no se sabe si estamos influidos culturalmente para ser idealistas y buscar a gente que se parezca a nosotros o si viene de serie. Los científicos nos dicen que estamos genéticamente programados para unirnos a personas que se parezcan a nosotros (lo mismo pasa con los amigos que elegimos).

El síndrome del gemelo evanescente (vanishing twins)

Llamarse igual que tu pareja, haber nacido el mismo día que ella (día arriba, día abajo) o parecerte físicamente a ella son pistas que nos indican que la persona pudo haber tenido un hermano gemelo (lo de que todos los zurdos sean gemelos supervivientes que hacen de espejo del desaparecido, me parece una afirmación muy atrevida).

Te voy dar par de ejemplos que he conocido a través de mi trabajo:

El caso de Carlos y Carla

Carlos y Carla eran una pareja feliz, ambos compartían profesión y aficiones, todo el mundo los conocía como los Carlos. Con el tiempo tuvieron una hija a la que llamaron Gemma y más adelante vino Emma. Emma nació el mismo día que Carla.

Un día le pregunté a Carla: “¿No son demasiados gemelos en esta familia?” Y Carla se quedó pensativa, luego me comentó que en una ocasión en una constelación familiar había aparecido una persona no identificada pegada a ella, eso la había inquietado pero no tenía una respuesta, nunca se había parado a pensar sobre ello.

El caso de Paula

Paula no puede tener hijos, lleva tres años intentándolo con su pareja, a la que quiere mucho, fue amor a primera vista, están hechos el uno para el otro, se entienden muy bien y no entienden por qué no se quedan embarazados. Al analizar su árbol genealógico observo inmediatamente que las fecha de cumpleaños de la pareja coinciden. Paula se ha casado con su hermano gemelo simbólico. Al poner atención sobre ello quién sabe lo que pasará con ellos dentro de unos meses. ¿Habrán desbloqueado el evento simbólico?

Ambos casos no dejan de ser du3los no hechos, en esta vida todo gira en torno al duelo.

¿Eres un gemelo superviviente? ¿Quieres contar tu experiencia?

Autora: Mireia Nieto